“El amor del Padre individualiza absolutamente cada personalidad como un hijo único del Padre Universal, un hijo sin duplicado en el infinito, una criatura volitiva irremplazable en toda la eternidad.” [LU, 12:7.9]
“Jesús siempre insistía que la verdadera bondad debe ser inconsciente, y que al hacer caridad no se permita que la mano izquierda sepa lo que está haciendo la mano derecha.” [LU, 140:8.26]
Ajustador de Pensamiento: “El auto control es la llave maestra y fue la llave del Maestro hacia una aproximación positiva de los conflictos. Operar de tal estado de consciencia intensificada, Jesús tuvo éxito en desactivar un vasto rango de tóxicos disparadores emocionales. Él fue un observador objetivo, no participativo. Su negativa a enredarse emocionalmente puso un freno significativo a la falta de autocontrol de los demás, ya que sabiamente se negó a alimentar sus incendios emocionales.
“Sin embargo, [Jesús] mostró al hombre la óptima manera de vivir, y ninguna generación está exenta de la tarea de descubrir como adaptar de la mejor manera, la vida de Jesús a sus propios problemas. Pero, no cometáis jamás el error de identificar las enseñanzas de Jesús con alguna teoría política o económica, con algún sistema social o industrial.” [LU, 140:8.10]
“En la historia del fariseo y del publicano que oran en el templo, el uno se sentía rico en espíritu —egotista; el otro se sentía «pobre de espíritu» —humilde. El uno era autosuficiente; el otro era receptivo a la enseñanza y buscaba la verdad. Los pobres de espíritu buscan las metas de riqueza espiritual: Dios. Y aquellos que buscan la verdad no tienen que esperar sus galardones en un futuro lejano; son galardonados ahora. Encuentran el reino del cielo dentro de su corazón, y disfrutan ahora de esa felicidad.” [LU, 140:5.7]
“El valor moral no deriva de la simple represión —de la obediencia a la admonición «no harás». El temor y la vergüenza son motivaciones indignas de la vida religiosa.” [LU, 140:4.7]
Ajustador de Pensamiento: “El reprimir es retener algo o prevenir un acto de voluntad, a menudo por la fuerza. La inhibición es un sentimiento que hace que uno se cohíba y sea incapaz de actuar de una forma relajada y natural. Ambos se refieren, generalmente, al acto de someter algo.