La expresión "Hombre Exitoso (u Hombre Hecho a Pulso)" fue acuñada el 2 de febrero de 1842 por Henry Clay en el Senado de los Estados Unidos, para describir individuos cuyo éxito yacía al interior de ellos mismos, y no de condiciones externas.
Ajustador de Pensamiento: “Una sociedad en la que la palabrería se ha convertido en una excusa generalizada para refutar la responsabilidad personal o colectiva en los esfuerzos fallidos, está condenada a pagar un alto precio por las consecuencias de su mentalidad perdedora.
“[Jesús] pocas veces se detuvo para corregir los malentendidos o resentir una interpretación errónea.” [LU, 141:7.12]
Ajustador de Pensamiento: “Es lo más conveniente para ti el erradicar todos los rastros de resentimiento de tu corazón para santificarlo, haciéndolo un conducto digno para el amor incondicional fluido. Algunos agravios son herencias generacionales cuyo punto de origen no es claro o ya no es relevante para los asuntos actuales. Otros son personales. Ambos son asuntos sin resolver. Su amargura duradera dificulta el avance individual y colectivo hacia la luz y vida.
“Aquellos que tienen conciencia de Dios sin simbolismo no deben negar el ministerio gracioso del símbolo a aquellos que encuentran difícil adorar a la Deidad y reverenciar la verdad, la belleza y la bondad sin forma ni rito.” [LU, 91:5.7]
“La religión inspira al hombre a vivir valerosa y alegremente sobre la tierra; combina la paciencia con la pasión, la compenetración con la dedicación, la simpatía con el poder y los ideales con la energía.” [LU, 99:7.3]
“Zaqueo: “Puede que yo sea un pecador, pero el gran Maestro ha venido a morar a mi casa; […] Voy a buscar la salvación con todo mi corazón y a aprender a hacer rectitud ante los ojos de Dios” [LU, 171:6.2]
Jesús: “Y No os sorprendáis por mis palabras ni os ofendáis por lo que hacemos, porque yo he declarado desde el principio que el Hijo del Hombre ha venido para buscar y salvar a aquel que está perdido.” [LU, 171:6.3]
“El peligro espiritual más grande del hombre consiste en el progreso parcial, el problema de un crecimiento a medias: el abandono de las religiones evolucionarias del temor sin acogerse inmediatamente a la religión revelatoria del amor.” [LU, 99:4.8]