“La felicidad y el regocijo se originan en la vida interior. No puedes experimentar verdadero regocijo completamente solo. Una vida solitaria es fatal para la felicidad. Aun las familias y las naciones disfrutarán más de la vida si la comparten con otros.” [LU, 111:4.7]
“La belleza del amor divino, una vez que entra plenamente en el corazón humano, destruye para siempre el encanto del pecado y el poder del mal.” [LU, 188:5.3]