“Los ciclos de respiración del espacio duran en cada fase por poco más de mil millones de años Urantianos (Terrestres) Durante una fase los universos se expanden; durante la siguiente, se contraen. [. . .] Por lo tanto, hacen falta un poco más de dos mil millones de años de Urantia para concluir el ciclo completo de expansión-contracción.”. [LU, 11:6.4-5]

Ajustador del Pensamiento: “Como un macroorganismo, el vasto cosmos tiene su propio mecanismo de respiración. Una sola de sus rítmicas inhalaciones y exhalaciones abarca eras, si se evalúa en términos de tiempo terrestre. Sus movimientos de marea tienen su Fuente en el Paraíso del Padre – el Dador del primer aliento, y de todos los posteriores.

¡Hay miríadas de maravillas codificadas en el aliento divino exhalado! Es el activador de todas las iniciativas creativas y co-creativas. El Amor cabalga en su ‘Corriente de Dios’, polinizando profusamente la trayectoria total con incontables nanopartículas de verdad, belleza y bondad. Así es como el Padre derrama Su armoniosa esencia divina, a través de los amistosos Vientos Alisios de Su siempre fresco aliento.

Así es como Él pasa la batuta de la vida – una suerte de varita mágica que ‘anima’ a los recién nacidos cuando emergen del mundo de agua salada de su cámara de incubación. Esta primera tierna expresión de amor divino, los envía en su viaje inaugural. Imparte las bendiciones del verdadero Padrino inclinado sobre la cuna de Sus hijos de la promesa.

Un aliento a la vez, Él te vigoriza para la duración de tu estancia planetaria. Cuando tu próxima fecha de vencimiento llegue, saldrás de este mundo montado en ‘la cola’ de tu último aliento, para nacer con aire hacia tu próximo destino experiencial. Y así sucesivamente.

El Aliento de Vida que fluye libremente – tu Proveedor de Vida – es demasiado valioso como para ser tratado despreocupadamente. Sin él, te desintegrarías instantáneamente en la nada. Con él, estás ungido como actor activo en un multiverso repleto de vida.”

Traducido por Silvia Adriana Cohane.