Ajustador del Pensamiento: "En Pentecostés, Jesús envió un nuevo Maestro para morar con la humanidad, el Espíritu de la Verdad (el Espíritu del Padre Universal y del Hijo Creador). Si te detienes a pensar en ello, fue un evento planetario sin precedentes, un momento innovador en la evolución planetaria espiritual. El Espíritu de Jesús, que ya no se limita a estar confinado a un cuerpo físico, sometido a las limitaciones del tiempo y del espacio, ahora podría estar llevando a cabo un ministerio universal. Se hizo accesible para todos, entonces y ahora.

"¿Son conscientes de los invaluables recursos espirituales que están a su alcance en su interior? ¿Aprovechan su influencia esclarecedora? Nunca es demasiado tarde para despertar a su realidad interior y consultar con ellos para llegar a las decisiones mejor informadas. Además, llegarías a darte cuenta de lo queridos que son como individuos y que, de hecho, importan mucho.

"Este fenómeno espiritual fue presenciado de primera mano por los apóstoles y los creyentes que habían estado escondidos durante 40 días, asustados, deprimidos y traumatizados por la muerte de Jesús en la cruz.

"Tan pronto como el Espíritu de la Verdad les fue conferido, su comportamiento cambió drásticamente: "Se encontraron de repente trasladados a otro mundo, una nueva existencia de gozo, poder y gloria... Ahora, estos asustados apóstoles emergieron de sus semanas de reclusión para aparecer con valentía en el templo... Y todos los discípulos eran conscientes de haber recibido una nueva investidura espiritual de perspicacia y poder". [Documento LU 194:1]

"La llegada del Espíritu de la Verdad fue innegable para ellos, como lo demuestra el marcado contraste entre su estado de ánimo de 'antes' y 'después'. Como seres humanos del reino, nacidos muchas generaciones después, aquellos de ustedes que descuidan su vida espiritual son ignorantes de los poderes espirituales que residen en ellos, relegados a un modo de espera. Sin embargo, los nacidos del Espíritu experimentan la activación instantánea de estos poderes internos, validados por sorprendentes e incontenibles oleadas de esperanza y valor en medio de circunstancias difíciles. Su activación espiritual los libera de su mentalidad de víctimas indefensas, lo que los lleva a tomar acciones proactivas, convirtiéndose así en los campeones del Espíritu de Verdad, Sus pies decididos en el suelo".

Traducido por Silvia Adriana Cohane.